The Unending Gift

domingo, diciembre 31, 2017

ESPERANZA NACIONAL DE 2018

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Domingo, 31.12.17

Un año muy peligroso ha hecho despertar a España

CONCLUYE hoy un año en el que España vivió peligrosamente. Porque durante el mismo se cumplieron muchas de las amenazas que se han gestado en años, lustros y décadas anteriores. Sin que nadie hiciera absolutamente nada por desactivarlas. Por el contrario se permitió que se consumara un golpe de Estado organizado durante años a plena luz. Hemos estado en 2017 cerca de la catástrofe. Porque pudimos lamentar muertos en enfrentamiento civil entre españoles. En lo que habrían sido daños irreparables. Sobre todo el día 8 de noviembre, cuando grupos separatistas con la complicidad de los Mozos de Escuadra paralizaron las comunicaciones en Cataluña. Fue paradójicamente la asistencia al delito por parte de la policía autonómica lo que evitó tragedias. Porque las víctimas de aquella operación masiva de coacción, los españoles de bien bloqueados en las carreteras, hartos en Cataluña de ver pisoteados sus derechos, estuvieron a punto de recurrir a la fuerza para defenderlos. Lo habrían hecho en muchos cortes con barricadas en autopistas y carreteras si los mozos de escuadra no hubieran ejercido un apoyo tan contundente a los delincuentes que cortaban el tráfico y cercenaban las libertades.
Esa fuerza armada de 17.000 miembros participó en esas y otras acciones necesarias para el golpe de Estado llevado a cabo por la Generalidad. Ahí es nada. Lo vieron todos los españoles el día 1 de octubre y después. Hasta llegar a la nefasta y vergonzosa proclamación desde el parlamento regional de «la república catalana, como Estado independiente y soberano». Nadie impidió esa página negra en la milenaria historia de la Nación Española y en cinco siglos de estado moderno.

Pero aunque hayamos vivido 2017 con peligro y ofensas insufribles, 2018 se abre con una esperanza que España no gozaba desde los comienzos de la transición. Se ha roto la permanente deriva antinacional que impuso el consenso político bajo el síndrome del antifranquismo. La grave agresión y la humillación sufridas han despertado a la nación. Capital fue el para muchos inesperado y soberbio liderazgo moral de un Rey Felipe VI que expresó el juicio y la voluntad nacional al tachar de intolerable lo intolerable frente a la insufrible política pusilánime y cobarde. Al discurso del Rey se unió el pueblo en Barcelona. Y el gobierno tuvo que reaccionar. La sociedad española se ha reencontrado con España. Que es una nación milenaria a la que se ha tenido maniatada y vejada a fuerza de identificarla con un régimen, el del general Franco, que duró 35 años y concluyó hace 42. La crisis en Cataluña está lejos de solucionarse. Pero España comienza este año de forma muy diferente a los anteriores. Las banderas nacionales siguen en las ventanas y la defensa de la nación, de su unidad, de su historia y de su lengua común, es ya prioridad para muchos millones de españoles. Quienes no reaccionen podrían verse pronto arrollados por esta nueva realidad tan esperanzadora.

MATARÉ A QUIEN PIDA PERNIL

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Sábado, 30.12.17

La Navidad devuelve a Venezuela la fuerza que el terror, la Mesa de Unidad Democrática y Zapatero le robaron

«Mano dura, y el que haga armas contra la República, que la FANB (Fuerza Armada Nacional Bolivariana) se encargue de él con todo su poder de fuego, así lo ordeno». Así procede la dictadura contra quienes protesten en las calles de Venezuela por la falta de comida para Navidad. «Mataré al que pida comer». Son fechas críticas para tiranías tan degradadas que no pueden alimentar a sus súbditos. Porque la población hambrienta sufre más en Navidad con la privación y su dolor puede superar su miedo. En países cristianos, es cuando la población vive más intensamente el valor de la dignidad humana y el apego a la familia. Es cuando más hiere la humillación de no poder alimentar a la familia y allegados.
El régimen narcocomunista ha llevado al colapso total al país. El caos en la cúpula, copada por delincuentes dedicados exclusivamente a enriquecerse, hace imposibles hasta gestiones sencillas. El presidente Maduro prometió que quien participara en las elecciones, que una parte de la oposición boicoteó, tendría en Navidad el pernil de cerdo tradicional. No lo hubo. Porque en Venezuela las granjas saqueadas y nacionalizadas son ruinas sin vida. Y porque fuera el régimen ya no paga. Dinero y mercancía suelen robarse en origen o por el camino. El productor en Portugal dijo que no mandaba nada mientras no cobrara los cuarenta millones en perniles del pasado año.

Maduro dice que todo se debe a una conspiración de Donald Trump y del Gobierno de Portugal. Da igual. Como si apela a extraterrestres. El caso es que la calle se mueve otra vez. La Navidad devuelve al venezolano ganas de lucha por la dignidad. Lo que le arrebataron las estafas de Maduro y su escudero español Zapatero y la traición de infiltrados y vendidos en esa oposición de hojalata que ya es la MUD (Mesa de Unidad Democrática). Maduro sabe que el engaño no funciona ya y teme el retorno a la calle de la oposición real, la heroica. Por eso recurre al terror. Es una dictadura cubana y rige la lógica Tiananmen.

viernes, diciembre 29, 2017

FELIZ CONSENSO DE CULTO A LA ARBITRARIEDAD

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Viernes, 29.12.17

Leyes especiales de la ideología de género acaban con la ley, no con la violencia

CUANDO se trata de ser correctos con las modas ideológicas, presumir de bondad y compasión y alardear de progresismo nadie se quiere quedar atrás. El Gobierno de España es campeón. Y ninguna comunidad autónoma hizo el ya habitual feo de ausentarse. Así ha sido con el Pacto de Estado –no podía ser nacional, eso tampoco– de Violencia de Género. Todas las representantes de las autonomías para esa consejería de «igualdad», en coro con la ministra Dolores Montserrat, ella también siempre la más «progresista» de la clase. Las sacerdotisas de la igualdad presentaban un pacto que destruye todo el resto de igualdad ante la ley que pudiera quedar después del periodo negro del zapaterismo. Con estas para la violencia de género, las de LGTB y otras que surjan en la tormenta mediática ideológica, España tiene ya leyes especiales a capricho. Que privilegian a unos españoles y dejan a otros en la absoluta indefensión legal. Que determinan profundamente el comportamiento de los privilegiados y de los inermes. Sin trivializar aquello, hay que recordar que esa es la senda que lleva a las leyes de Nuremberg de 1934. Allí se hicieron leyes especiales para los judíos. Si dices esto te llaman cómplice de los hombres que matan a sus mujeres. De los que son asesinos y maltratadores que merecen pudrirse en la cárcel. Y de los que son enloquecidos porque denuncias falsas les han quitado a sus hijos, su casa, su patrimonio, su trabajo, su cordura y sus ganas de vivir. Denuncias falsas que muchas veces recomiendan las abogadas, que quedan casi siempre impunes y que, por supuesto, aumentarán con las nuevas medidas.
El Pacto llega bajo la conmoción de las muertes de mujeres por violencia doméstica. Con su enorme efecto mediático son ya siempre un alegato para ese radicalismo ideológico. Nadie pida sentido común o equilibrio. Nadie demande un análisis serio sobre las causas de unas muertes y otras. De las de parejas homosexuales. De las muertes de hombres y tantos suicidios de hombres a los que han destruido la vida. También las mujeres son tratadas de forma muy distinta según convenga al cálculo político e ideológico que hay tras el eco mediático. Las víctimas de violaciones colectivas son mártires omnipresentes en las televisiones siempre que sean violadas por españoles. Las víctimas de «manadas» de Marruecos u otro lugar más remoto, como hace días en Canarias, no existen. Ahí dosifican feminismo en aras de antirracismo para que el cóctel ideológico sea apropiado. Los medios obedecen. Los partidos participan. Por convicción o por cobardía. Los ciudadanos callan. Temen el reproche.

El Pacto se aprobó en septiembre en el Congreso sin votos en contra. Fueron 278 a favor. Las 65 abstenciones se debieron a que los comunistas de Podemos y algún otro querían aun más medidas de ideología de género. Aún más medidas especiales de castigo extrajudicial, aún más leyes especiales que hacen irrisoria la igualdad ante la ley y la presunción de inocencia, base del Derecho. Y querían aun más poder y dinero para organizaciones feministas y para esos órganos estatales o paraestatales que, copados por el feminismo y la extrema izquierda, hacen sospechoso al hombre desde un principio de toda causa y ridículo cualquier intento de defenderle. Ahora el Pacto trae 200 medidas que servirán para hacer más irrespirable el ambiente social, enconar los conflictos, fomentar la denuncia falsa y promover la injusticia. Además de la censura porque los medios habrían de someterse a dichas arbitrariedades. Ah, se me olvidaba, esto que no falte, mil millones para que se repartan órganos y pesebres ideológicos al final al servicio de la extrema izquierda, de agitadores contra la familia y enemigos del Estado.

martes, diciembre 26, 2017

QUE EL FUEGO CONSUMA A MI ENEMIGO

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Martes, 26.12.17

La ley de Memoria Histórica ha generado nuevas camadas totalitarias

LAS Navidades y la Semana Santa son las fiestas clave del cristianismo. Evocan el nacimiento del hijo de Dios hecho hombre para redimir a la humanidad en la fe del perdón y la esperanza y su entrega en la Pasión y en la victoria sobre la muerte en la Resurrección. Los enemigos del cristianismo, sobre todo los enemigos de la civilización occidental, saben muy bien que esas fechas son las mejores para atacar a la religión cristiana. Como ninguna ideología y pese todas sus crisis y debilidades del siglo XX ha sabido resistir a los ataques de los proyectos redentores ideológicos del nazismo y del comunismo. El movimiento comunista siempre vio en el cristianismo su principal rival y ha intentado exterminarlo o quebrarlo allá donde ha podido desde la URSS a los campos de la muerte en Camboya y por supuesto en la España de la II República que nació con la quema y destrucción de iglesias y conventos. Fue tan inaudito el grado de vesania de los comunistas y anarquistas, tal su odio y voluntad de destrucción en 1931, 1934 y 1936, que espantaron a un mundo curtido en desgracias y horrores. Aquella apoteosis de odio y vileza arrolladora es aun hoy objeto de estudio. Pero también es siniestra actualidad.
En la Nochebuena anteayer, los comunistas de Izquierda Unida de Madrid publicaban en la red social Twitter un mensaje con el lema de «Merry Christmas-Feliz Navidad» y la imagen de un árbol de Navidad en llamas. El mensaje es claro. «Cristianos, contra vosotros volveremos con las llamas». IU es un partido legal con representación parlamentaria que gobierna en muchos ayuntamientos. Su mensaje, mezcla de aplauso al crimen y amenaza a los cristianos, es muestra elocuente de la deriva de la izquierda española. El revanchismo guerracivilista, convertido con la ley de Memoria Histórica en política gubernamental por el socialista José Luis Rodríguez Zapatero y mantenido como tal de forma ignominiosa por Mariano Rajoy, ha blanqueado para las nuevas generaciones las acciones criminales de las fuerzas llamadas «antifascistas». Entre ellas, la quema de iglesias y los asesinatos de religiosos con vocación de exterminio de todo el clero. Las falacias comunistas hechas verdades oficiales convierten los pogromos anticristianos en actos incontrolados de un pueblo justiciero. No habría culpa de las autoridades republicanas pero no merecerían condena por ser expresión de la ira colectiva por la opresión de la Iglesia en su alianza con los «poderes reaccionarios».
Esta reflexión no es un ejercicio académico sino la constatación de una realidad que demanda una reacción. Porque con la rehabilitación general de los asesinos del Frente Popular se multiplica el peligro de una emulación. Unos tienen abuelos ejemplares y otros buscan ejemplo de los abuelos milicianos de los demás. Pero a los jóvenes les dicen y ellos creen que las sacas y asesinatos o incendios de iglesias eran actos antifascistas dignos. Grupos de escolares menores de edad se manifiestan al grito de que «la mejor iglesia es la que arde». «Quemar iglesias me parece una barbaridad si no hay nadie dentro», dice un comunista uruguayo colaborador de Pablo Iglesias y de la televisión La Sexta del Grupo Planeta. Ridiculizar las Navidades ya es tan común como banalizarlas y se hace hasta en los medios oficiales. La ofensa a los cristianos es gratis y aplaudida. Ayer, hasta Gaspar Llamazares, exdirigente de IU lamentaba el mensaje de sus excamaradas. Pero abunda y cunde el odio anticristiano como alimento para estas camadas de nuevos redentores totalitarios. Que nos avisan que disfrutarán del fuego que consuma a su enemigo, nosotros.

domingo, diciembre 24, 2017

EL ESPÍA SALIÓ RANA

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Domingo, 24.12.17

En Ucrania, EE.UU. vuelve a defender valores occidentales

SI el presidente Donald Trump es realmente un agente ruso como pretenden la prensa norteamericana en su histeria antitrumpista, la prensa europea que la copia y los sectores radicales de su Partido Demócrata, es el espía que mejor confunde de la historia. O le salió rana a Moscú. Porque la Casa Blanca anuncia que va a suministrar armas al gobierno de Ucrania para combatir a las tropas invasoras de Rusia. Trump hace saber a Vladímir Putin que la invasión de su vecina Ucrania es el mayor conflicto existente entre Washington y Moscú. Que todas las demás diferencias son manejables. Pero que no puede haber compromiso con la violación de fronteras e invasión de territorio de un estado soberano vecino.
De forma lenta pero segura, Trump restablece así códigos y referencias hechos añicos en ocho años de debilidad obamista. Vuelve el mensaje de que sus aliados siempre podrán contar con EE.UU. cuando defiendan sus mismos principios. Y que EE.UU. vuelve a cumplir la palabra dada. Esto vale para la capitalidad de Jerusalén y para una Ucrania invadida. En dos mandatos de Obama, Rusia se ha podido permitir de todo. Desde invadir a su vecino y anexionarse parte de su territorio a erigirse en principal actor del Mediterráneo oriental y decidir la guerra siria. El acto de cobardía de Obama de recular cuando fue desafiado por el régimen sirio con el uso de las armas químicas fue el golpe definitivo a la credibilidad de EE.UU. en la región, ya débil desde el nefasto discurso adanista de El Cairo en 2009.
Desde hace tres años fuerzas rebeldes y tropas rusas ocupan la región del Donbass en la frontera entre ambos países, además de la península de Crimea, cuya anexión a Rusia no reconoce nadie pero muchos asumen como irreversible. Ya veremos. Obama siempre se negó a ayudar a Kiev frente a las tropas invasoras. Ahora Trump dice que Ucrania tiene derecho a defender su territorio dentro de unas fronteras reconocidas por Rusia en su día y que incluyen tanto Ucrania oriental como Crimea. Putin aludió al derecho del régimen sirio de Assad a restablecer su integridad territorial para su intervención masiva en aquel país.
A Rusia no le ha gustado esta decisión de su supuesto agente. Que llega días después de que el presidente verbalizara solemnemente lo que Rusia y China practican, la rivalidad global. «Hacemos frente a potencias rivales, Rusia y China, que buscan retar la influencia, los valores y la riqueza estadounidense», dijo Trump. Cursis e hipócritas de la prensa y la política europea se han mesado los cabellos. Trump solo dijo verdades que Rusia y China saben y asumen.

Washington ha roto con el relativismo y el oportunismo de Obama, con el discurso buenista y falsario y la falta de hechos. Para recuperar iniciativa donde solo la tenían los enemigos. A ver si aprenden algo los europeos.

MACRON, TRUMP Y ORIENTE MEDIO

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Sábado, 23.12.17

Los árabes suníes colaboran con Israel y EE.UU. e irán a Francia de compras. Así es la vida

El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, visita París en busca de consuelo y apoyo del presidente Emmanuel Macron en su campaña contra la decisión de EEUU de trasladar su Embajada a Jerusalén. Con Angela Merkel sin gobierno, Francia es el mejor país para escenificar esta protesta en Europa. Cuenta Abás con la ambición de Macron por encontrar un papel internacional propio en Oriente Medio. Se esfuerza el presidente por devolver a Francia alguna relevancia allí. Donde se escenifica ahora el gran choque entre Arabia Saudí e Irán. Hecho es que Francia y toda Europa apenas pintan hoy nada en Oriente Medio. Más allá de su dinero siempre malversado tanto en Cisjordania como en Gaza.
Macron coincidió con Abás en que el presidente Trump se margina en la región por cumplir ahora lo que ya había decidido el Congreso de EE.UU. por abrumadora mayoría en 1995. Nadie se margina por cumplir lo acordado. Ni en Francia ni en Palestina dijo nunca nadie que EE.UU. se marginaba en 1995 como mediador. Tampoco cuando Clinton, Bush y Obama confirmaron todos ellos la condición de Jerusalén como capital del Estado de Israel y localización lógica de la Embajada.

Trump ha cumplido la decisión del Congreso y la promesa de sus tres antecesores. Y el fariseísmo celebra ahora jornadas gloriosas. Pero la realidad es otra. EE.UU. es y será pieza capital en el tablero. Mientras el papel de los europeos hoy parece limitarse al de acoger refugiados árabes y despachar judíos –muchos franceses– hacia Israel que emigran por el nuevo antisemitismo musulmán en Europa. Macron lo sabe. Mostrar solidaridad con los palestinos es un ritual barato en el que son expertos europeos y árabes. Incluso así Macron le ha dicho a Abás que no a reconocer al Estado Palestino. Ni para compensar la supuesta afrenta de Trump. Que pronto eclipsarán los intensos intereses de momentos críticos. Y mostrarán a los europeos la cruel realidad. Los árabes suníes colaboraran con Israel y Estados Unidos. Y a Francia y Europa irán a invertir y de compras. Así es la vida.

NO HAY MILAGROS SIN CORAJE

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Viernes, 22.12.17

Quienes esperaban de las elecciones una rebaja de la tensión y una salida del drama con expectativas prometedoras se han vuelto a columpiar

Las calles del centro de Barcelona no parecían dispuestas a salirse del bullicio sosegado y navideño de la tarde ni siquiera cuando los resultados anunciaban ya de nuevo tormenta. No servirá para casi nada la alegría muy genuina de Ciudadanos que han culminado una gesta insólita con Inés Arrimadas, se han impuesto rotundamente en votos y escaños a los partidos separatistas y son ya el partido de referencia de la nación española en Cataluña. Porque los otros partidos que podrían eventualmente ser aliados en un bloque constitucionalista, el Partido Popular y el PSC, han sufrido un terrible descalabro uno y la frustración de todas sus ilusiones el segundo. Quienes esperaban por tanto de las elecciones de ayer una rebaja de la tensión y una salida del drama con expectativas prometedoras se han vuelto a columpiar. Y quienes lanzaron la pelota al frente y convocaron unas elecciones en octubre para diciembre con la única esperanza perfectamente infundada de encontrar una solución que les permitiera evitar imponer la ley con la legítima fuerza del Estado si fuera necesario se han columpiado aun más.
Porque la gobernabilidad no va a ser más fácil y porque el presidente Mariano Rajoy y su «experta en Cataluña», la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, han sufrido un revés aniquilador que posiblemente sea irreversible. Y cuyas consecuencias en la política nacional se habrán de ver pronto y serán cuantiosas por mucho que se intenten tapar en La Moncloa. El resultado de la aventura ha dejado al PP en la insignificante marginalidad en la comunidad autónoma, ha coronado a Ciudadanos como el nuevo partido nacional ya dispuesto a repetir en toda España lo que le ha hecho al PP en suelo catalán y ha resucitado a Puigdemont como líder del separatismo catalán que ya exige el reconocimiento como el legitimo presidente de antes y de ahora. Se provoca además el choque de bruces de nuevo entre la política y las leyes porque ahora hay que esperar que Puigdemont se presente en España y sea detenido y volvamos a tener la fiesta publicitaria que acabará por lastrar realmente la economía de toda España y no solo la catalana que puede darse por condenada.
Lo más militante del día habían sido los lacitos amarillos en las colas ante los colegios, la mala cara de algunos al reconocer a ciertos periodistas de Madrid identificados como agentes del mal absoluto españolista y las declaraciones de Carles Puigdemont desde su Nido del Águila de Ikea en Bruselas. Muchos se han reído mucho de Puigdemont y al final va a ser el ridículo paseante de los bosques de Flandes que cumple todos sus deseos. Los separatistas mantienen su mayoría absoluta en el Parlamento de Cataluña ya veremos si con su total desafío contra el Estado y la ley. Dicen muchos que no será ahora mismo en ningún caso. No lo excluyan. Porque Puigdemont tenía el reto de sobrevivir con una candidatura inventada en torno a su no siempre muy digna persona. Y no iba a ser nada fácil. Enfrente tenía a Esquerra Republicana, un partido de cuadros magníficamente engrasado y motivado, dispuesta a erigirse en único intérprete del independentismo.
Pero la magia de la fabulación nacionalista mueve montañas y ha sido Puigdemont el triunfador con sus 34 escaños frente a los 32 de una ERC que ayer mostraban unas caras muy largas y no lograban reunir ánimos para arrancar la fiesta en Barcelona. Otro foro con caras larguísimas era la fiesta que no fue del PSC, cuyos 17 escaños son un triste balance de una campaña en la que Iceta acabó creyéndose realmente que era el elegido para sacar a Cataluña de la crisis. Era muy evidente que no era así y ni Borgen ni nada le va a servir para jugar un papel en un parlamento que vuelve a estar dominado por los enemigos del Estado. Que lo serán más por el hecho de que sus cúpulas tienen un horizonte penal oscuro como la noche. Que no va a poder aclarar ninguna maniobra de las que el propio Iceta pretendía. Porque España, que es mucho más que Cataluña aunque no lo parezca en los medios desde hace mucho tiempo, demanda una solución al desafío independentista que no va a poder ofrecer el parlamento catalán ni con un grupo tan cuantioso como el de Inés Arrimadas. Con los cuatro de la debilitada CUP, Puigdemoint y ERC tendrán otra vez el aparato del régimen a su plena disposición para proseguir un proyecto que es la prolongación del golpe de estado iniciado en octubre.

Los catalanes que ayer salieron como nunca a las calles a votar están presos de décadas de adoctrinamiento, de las más obscenas mentiras continuadas a lo largo del tiempo. Que una mitad haya salido a intentar romper las cadenas les honra. No es suficiente. Pero eso se podía haber tenido muy claro hace dos meses cuando se convocaron unas elecciones sin cambiar en absoluto la brutal presión social que los separatistas han construido en décadas y que el 155 podía haber al menos debilitado pero ha dejado intacto. Sin esfuerzos ni asumir riesgos no suele haber grandes conquistas Y mucho menos milagros.

CASTIGADA POR FACHA

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Viernes, 22.12.17

Parte no menor de la UE rechaza la política socialdemócrata de Bruselas

LA Comisión Europea parece horrorizada ante la inminente amenaza de dictaduras en el seno de la Unión Europea. ¡Qué cosas! Anuncia para combatir ese peligro hasta las más draconianas medidas, como la retirada del derecho a voto a quien ataque al Estado de Derecho. ¡Pero qué espanto! ¿Cómo nos ha podido pasar algo así? Si no ha habido golpes de estado más allá de nuestro «putsch» regional en Cataluña. Los 28 miembros cumplen con sus rituales electorales y con procedimientos parlamentarios. Ningún ejército se ha levantado en armas. ¿Cuál es entonces la terrible amenaza que nos debiera tener a todos en vilo? Resulta que la «alarma antidictatorial» que hace desempolvar por primera vez la Gran Berta del artículo 7 del Tratado, se debe a un plan perverso del gobierno de un país de la UE que intenta ¡horror, terror y pavor! aumentar su control sobre los jueces.
Tranquilos, que no se trata de España. Aquí no hay una reforma para un mayor control político sobre los jueces. Ya se hizo. El PP prometió una reforma en el sentido contrario, precisamente porque la sociedad clamaba contra una obscena politización de los jueces y su dependencia de los grandes partidos. Eso está olvidado. Acuérdense del «Montesquieu ha muerto» de Alfonso Guerra para zanjar aquellas chorradas de la independencia judicial. Porque la legitimidad de los jueces y sus órganos de gobierno debían emanar de la voluntad popular, es decir del parlamento. Lo demás era defender a los jueces convertidos en una casta de francotiradores reaccionarios, muchos de ellos franquistas, que se creían por encima del bien y del mal y eran además profundamente corruptos. Así se pensaba y así se hizo aquí y jamás nadie nos tachó por ello de dictadura. Tampoco a otros países famosos por jueces amigos y socios de políticos.

Pero ¡ay! en esta Europa socialdemocratizada hasta el tuétano hay cosas que hechas por unos reciben aplausos y por otros llevan a prisión. Como Rita Maestre y los brutos de Blanquerna. España fue Rita. Y el papel de asaltante de Blanquerna se lo «come» Polonia. Por facha. No es que el gobierno de Varsovia sea inocente. Claro que quiere controlar a los jueces. Como el PSOE en su día y el PP. Porque la mayoría de los jueces en Polonia sí son excomunistas o socialdemócratas, una casta intocable con fama de ser francotiradores y además corruptos. Pero además sabotean como pueden la nueva política polaca. Que es de un gobierno derechista, que todo socialdemócrata en Varsovia, Berlín, París o Bruselas quiere derribar. La mayoría de polacos está a favor de la reforma judicial que condena Bruselas. Ha votado a ese partido para lo que hacen y los insatisfechos son minoría. Como Victor Orban en Hungría, otra bestia negra para la socialdemocracia europea. Tiene muchos defectos, sin duda, incluida la mala costumbre de ser reelegido. Quizás porque también responde a las inquietudes y demandas de su electorado y, por ejemplo, le da a las familias lo que le niega a los refugiados que no acepta. Una parte no menor de Europa ha roto ya con la socialdemocracia de izquierdas y derechas que es ideología oficial de Bruselas. Que Polonia, Hungría, Eslovaquia y Chequia y ahora Austria –pronto pueden ser más– tienen planes políticos muy distintos a los que en pasadas décadas se han aplicado sin reservas en la UE. Bruselas tiene que entenderlo. Igual que no van a poder forzar a estos países a aceptar la inmigración musulmana, no van a poder tampoco imponer criterios ideológicos que se rechazan con amplio apoyo popular en estos países. Si lo intentan vamos directamente al Polexit. Si sucede, la UE tendría los días contados.

martes, diciembre 19, 2017

TOM PAYNE EN LA HOFBURG

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Martes, 19.12.17

Hay que atreverse a decir las verdades para un triunfo del sentido común

ERAN unos cinco mil, decía la Policía, los manifestantes que protestaban ayer delante del Palacio de la Hofburg contra lo que llamaban «la llegada de los nazis» al Gobierno en Austria. Dentro, en la antesala del que fuera venerable despacho del viejo emperador Francisco José, juraban su cargo los 13 ministros del gobierno del primer ministro más joven de Europa, Sebastian Kurz, de 31 años. Lo hacían ante el Jefe del Estado, Alexander van der Bellen, que ya cumplió los 73. Es un choque generacional muy simbólico. El viejo izquierdista de los Verdes, nacido en plena guerra mundial, representante típico del sesentayochismo cargado de ideología, abría la puerta a un joven ya de educación digital, que considera la Guerra Fría tan remota como aquellas guerras napoleónicas cuyos efectos se zanjaron precisamente en aquellos salones allá en 1815. Van der Bellen ganó hace un año esa presidencia frente al candidato del FPÖ, Norbert Hofer.
Ayer Hofer juraba su cargo como flamante ministro de Infraestructuras. Con otros cinco ministros de su partido. Ni Bruselas, ni Merkel ni nadie relevante protestó contra este gobierno de conservadores del Partido Popular (ÖVP) y derechistas del FPÖ. Un gobierno de derechas. Salvo esos cinco mil, masa tan poco seria como sus lemas: «Los nazis llegan al gobierno». Hasta ellos saben que no son nazis. Lo sabían el año pasado cuando Bruselas y Alemania dirigieron el espectáculo «antinazi» contra Hofer. Significativo es que la farsa, que entonces compensaba, hoy ya es inútil. El objetivo para Merkel no era Hofer sino el partido AfD, que le disputa el espacio en la derecha. Quería impedir que llegara al Bundestag. Ya tiene 93 diputados. De nada le sirvió la campaña anti-Hofer. Los cinco mil son esos que llaman nazi o fascista a todo el que no sea de extrema izquierda. En Austria son cinco mil. En España cinco millones. Y los compañeros de viaje y sus medios. En España los políticos aún no se atreven a decir las verdades que llevan a ese triunfo del sentido común.

En Austria está pasando algo muy importante. Aún no se sabe si tendrá éxito o se malogrará. Por lo que sea. Por debilidad de unos, porque se radicalicen otros o se dejen seducir por tentaciones como las del amigo Vladimiro, ansioso por corromper a cualquiera. Pero de momento hay voluntad y coraje para romper diques del miedo. Se ha votado a quienes proponen cambios en lo que no funciona y enmiendas a los errores que la obcecación ideológica ha impedido corregir. Ha sucedido porque la insatisfacción popular devoraba a los partidos viejos. Y un joven asaltó el ÖVP. Hace un año era un partido muerto con líderes sin otra idea ni deseo que seguir gobernando con el otro partido, igual de viejo, igual de muerto, el socialista (SPÖ). El joven Kurz se hizo con el partido propio y el mensaje ajeno, compitió con Strache del FPÖ y ganó y hoy lidera la coalición de ambos. Su programa es razonable. Más estado nacional, Europa sí, pero con reformas, sin atropellos y más subsidiaridad, ahorro en recorte de burocracia y reforma del Estado, reducciones fiscales para empresas y familias, fomento de la inversión extranjera, seguridad y más condenas para delitos sexuales y violentos, recorte a inmigración y asilo, exigencia de rendimiento en las escuelas, formación en la excelencia, subida de pensiones y fomento de la natalidad. Ah, y habrá centralización de ciertos poderes. No parecen muy nazis las propuestas. Son pasos suaves, eso sí, todos en la misma dirección de desideologización, fin de la irracionalidad y corrección de errores. Del Sentido común, el título de aquel panfleto de Tom Payne por la revolución democrática.

lunes, diciembre 18, 2017

EL ENCAJE EN ESPAÑA

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Domingo, 17.12.17

No se desencaje nadie de ira en Extremadura. Que antes hay que pagar el encaje permanente de chantajistas, ventajistas y plañideras

HAY muchas formas de insultar. Les voy a enumerar algunas. Siete de cada diez trenes entre Talavera y Madrid llegaron tarde a su destino en el mes de noviembre. Más espectacular aún que ese ruinoso dato es este otro: el trayecto entre Talavera y Madrid es de unos cien kilómetros. Se tardaba una hora y diez minutos en el año 2000. Ahora son una hora y 50 minutos. Eso si no hay retraso. Hablamos del tren que sigue hacia Extremadura. Que es toda una aventura. Los 400 kilómetros entre Madrid y Badajoz se recorren en seis horas. Eso sin retraso, que es casi nunca. Si se quiere ir uno de Extremadura a Andalucía, de capital a capital, de Mérida a Sevilla, se tarda cuatro horas para 190 kilómetros. A menos de 50 kilómetros por hora de media. Hay tramos en los que el tren, no solo este, circula a 30 kilómetros porque lo recomiendan las vías, no vayamos encima a tener un disgusto. Que lo importante al fin y al cabo es llegar vivo. Unos cuantos miles de extremeños se gastaron su dinero el pasado 18 de noviembre para acudir a Madrid, casi todos en coche o autobús, para protestar por lo que es un insulto grave, un desprecio intolerable y un agravio insufrible. Salieron en los periódicos, es cierto. Un momentito tan solo. Y hay que temer que los trenes a Extremadura sean como los celebérrimos soterramientos de Valladolid o Murcia, víctimas de una fatalidad sobrenatural que da casi más angustia que rabia.

Mientras, en nuestra región nororiental más insatisfecha, la que se siente tan maltratada que exige cariño a base de golpes de Estado, se transita que es un primor en trayectos que se contabilizan en minutos entre las cuatro capitales de provincia, todas ellas conectadas por tren de Alta Velocidad Española. Los extremeños arrancaban aquel día mediante pago con sus pocos dineros del viaje a Madrid unas pocas imágenes en veinte segundos de televisión y cuatro fotos y pocas líneas de texto en los periódicos. Llevamos al menos un año en el que los medios de comunicación no hablan de otra región española que de Cataluña. Lo hacen para pedir comprensión al delito, ayudas, dinero y sobre todo para exigir un trato especial. El privilegio demandado llega al extremo de pedirse impunidad para los criminales que han dado el golpe de Estado y anuncian otro. Esto sucedió horas después de que la vicepresidente del Gobierno anunciara «medidas de apoyo para la marca Barcelona». Todo ello días, semanas después del cuponazo maravilloso que se llevó el País Vasco porque Rajoy se quiere llevar bien con el PNV y no vamos a discutir por mil o dos mil millones. Que las traviesas de madera de las vías férreas extremeñas aún aguantan unas cuantas legislaturas. No se desencaje nadie de ira en Extremadura. Que antes hay que pagar el encaje permanente de chantajistas, ventajistas y plañideras.

EL NIÑO PRODIGIO

Por HERMANN TERTSCH
Enviado Especial a Viena
ABC  Domingo, 17.12.17

SEBASTIAN KURZ  CANCILLER ELECTO

Perfil

Sebastian Kurz ya es canciller federal de Austria. A los 31 años. Pocos jóvenes habrán tenido tan pronto tan claro un objetivo tan alto. Y lo ha conseguido. Es ya el jefe de Gobierno más joven de la historia de Austria, de la Europa actual y quizás de la historia de Europa. Hijo único de una familia de clase media vienesa, de un ingeniero y una maestra de escuela, es un fuera de serie. «No ha cometido un solo error desde que entró en política», repetían los observadores cuando lanzó el órdago a su partido en la primavera pasada. Logró que el ÖVP apoyara una lista personal y todos los barones le declararan lealtad orgánica y sumisión programática. Él decidía, hizo saber a todos, la política, las prioridades y los contenidos. Imitó la operación para el lanzamiento de Emmanuel Macron en Francia. Con una diferencia: Macron fue aupado por todo el «establishment» francés, Kurz lo hizo él por su cuenta. Un niño prodigio con recursos.

A los 31 lleva ya casi diez en cargos públicos. Todos le reconocen que es articulado en su mensaje, conciliador en el trato y eficaz en la gestión. Sin más estudios superiores que unos semestres de derecho, Kurz ha demostrado una capacidad inaudita de reacción e inmenso instinto. Pasó fugazmente por el ayuntamiento de Viena, fue secretario de Estado de Inmigración en el ministerio del interior con 23 años. Y en 2013 ya se perfilaba como la única esperanza de un partido popular que languidecía en otra frustrante gran coalición con los socialistas. Con 27 era ministro de Exteriores. Dejó que los jefes de Gobierno socialistas Fayman y Kern cargaran con el desgaste y él cosechó los méritos por distanciarse de Merkel en la política de refugiados. Arrebató así en las elecciones de octubre a su futuro socio de coalición su mensaje derechista y la primera posición. Ahora habrá de demostrar si hay convicciones más allá de la ambición y cómo supera los errores que en su nueva condición ya no podrá evitar siempre.

EL NUEVO GOBIERNO DE AUSTRIA SE POSICIONA CONTRA MERKEL

Por HERMANN TERTSCH
Enviado Especial a Viena
ABC  Domingo, 17.12.17

Busca limitar de forma drástica la inmigración y se opone a las cuotas que defiende la canciller alemana

Austria tiene desde ayer un nuevo gobierno que se proclama europeísta, pero demanda mayor papel para los estados nacionales y se aleja claramente de las líneas maestras socialdemócratas de la política europea. La composición del gobierno y el programa exponen voluntad de ruptura con la hegemonía política y cultural de la izquierda habida en Austria a lo largo de prácticamente medio siglo. El nuevo canciller, Sebastian Kurz del Partido Popular (ÖVP) y el vicecanciller Heinz Christian Strache del Partido de la Libertad (FPÖ) presentaban ayer el nuevo gobierno, que entre sus principales objetivos tendrá el refuerzo de la seguridad interior y represión de la delincuencia, radical restricción a la inmigración, protección familiar, reforma educativa con el retorno de exámenes y fomento del rendimiento, una general liberalización económica, rebajas fiscales y más inversión.
AFP  El canciller electo, Sebastian Kurz (izquierda), junto al futuro vicecanciller, Heinz Christian Strache

La coalición ha querido tranquilizar a los que dentro y fuera del país temen las intenciones del FPÖ al que muchos tachan de ultraderechista. Queda por ejemplo explícitamente descartado en el programa de gobierno cualquier iniciativa, también un referéndum, para promover la salida de Austria de la UE. «Austria será un miembro leal que se someterá siempre a las decisiones de la mayoría», dijo el líder de ese partido, el vicecanciller Strache. Las primeras reacciones hablan de una política de pequeños pasos para no asustar a nadie. Pero todas en la dirección ideológica. «Todos en la dirección correcta» que dijo Strache.
Adversarios de esta alianza y los socialistas en plena crisis existencial critican que finalmente el FPÖ se haya hecho con los ministerios de Interior, Defensa y Exteriores, aunque la titular de esta cartera es una independiente, experta en relaciones internacionales formada en Israel y EE.UU. que habla siete idiomas. Los intentos del jefe del Estado, Alexander Van der Bellen, de evitar que Interior y Defensa quedaran en manos del FPÖ también han fracasado.

Un lugar emblemático

Fue toda una señal que la nueva coalición presentara al Gobierno en el monte Kahlenberg que se alza junto a Viena. Allí celebraron misa las tropas cristianas bajo el mando del Rey Sobieski antes de lanzarse sobre las tropas turcas que asediaban la ciudad en 1683. Sonriente, Kurz restaba ayer importancia simbólica al lugar. Clara y unificadora es sin duda la voluntad de poner fin a la política de inmigración de las pasadas décadas. Como de romper con la canciller Merkel en sus intenciones de instaurar cuotas a los países. «La solución a la inmigración ilegal no está en su reparto». Ayer, canciller y vicecanciller dejaban así claro que el grupo de Visegrado de Hungría, Polonia, Chequia y Eslovaquia tienen ya un nuevo y firme aliado en su frente contra Merkel.

DERECHA Y POPULISTAS CIERRAN UN ACUERDO DE GOBIERNO EN AUSTRIA

Por HERMANN TERTSCH
Enviado Especial a Viena
ABC  Sábado, 16.12.17

A los dos partidos los une su rechazo a la llegada masiva de inmigrantes

CAMBIO DE RUMBO
El nuevo gobierno será más euroescéptico y más alineado con los países del Grupo de Visegrado

Austria ya tiene un nuevo gobierno. Será presentado el próximo día 20. Bajo el primer ministro más joven de Europa, Sebastian Kurz, de 31 años, será un gobierno de claro perfil de derecha que rompe una larga tradición de política socialdemócrata en Viena. El conservador Partido Popular (ÖVP) y el derechista Partido Liberal (FPÖ) forman un gobierno que se espera se distancie claramente de la política social-liberal practicada siempre por Austria en sintonía con su gran vecino septentrional, Alemania. Se endurecerán las condiciones en el sistema de ayudas sociales, habrá rigor en el gasto público y liberalización para mayor competencia, se extremará el control migratorio, prioridad para la seguridad, habrá una política de protección de la familia y una reforma contundente de la educación con métodos más exigentes.

AFP Sebastian Kurz, primer ministro electo de Austria, durante una reciente rueda de prensa

Muchos austriacos esperan con entusiasmo y otros temen con angustia que realmente sea Austria donde comience ahora el desmantelamiento del entramado legal y social generado durante medio siglo por el sesentayochismo político y cultural con una clara hegemonía de la izquierda en todos los campos de la vida social. Este gobierno es la primera gran esperanza de liquidar las estructuras del consenso social que en su día se consideraron ejemplares y hoy son una plaga paralizante. Se cree probable una aproximación a la política euroescéptica de sus vecinos orientales del Grupo de Visegrado: Hungría, Polonia, Chequia y Eslovaquia. Kurz visitó el jueves al presidente de la República, Van der Bellen, para informarle del fin de las negociaciones.
Las negociaciones entre ÖVP y FPÖ que se han celebrado durante semanas en el Palacio Epstein de la capital austriaca estaban ayer ya en sus pasos finales de confirmación de ministros y altos cargos. Hoy podrían darse ya a conocer las carteras y los compromisos de coalición de unas conversaciones que se han desarrollado sin excesivos sobresaltos. El gran ganador de las elecciones del 15 de octubre, el joven Sebastian Kurz, que había revolucionado su partido al imponerles una política y una lista personalista al estilo Macron, tenía claro que no quería un nuevo gobierno con los socialistas del SPÖ con los que su partido había gobernado tres legislaturas seguidas.
Eligió Kurz como socio al derechista FPÖ de Heinz Christian Strache mucho más cercano a él que los socialistas respecto a la política de refugiados y a la política de Angela Merkel en la región que está creando ahora graves fisuras. Austria considera –como sus vecinos orientales– que ni Bruselas ni Merkel puede imponerles cuotas de inmigración. Austria es de los que más han aceptado en el pasado. Las cosas han cambiado mucho ya en Europa. No hay la mínima resistencia o irritación exterior a esta coalición del ÖVP con el partido de Strache. En el año 2000 una coalición así provocó la imposición de sanciones de la UE. Se levantaron cuando la Comisión reconoció que las medidas eran desproporcionadas. Pero también, cuando el FPÖ hace solo un año presentaba a su candidato a la presidencia de la República, la izquierda europea montó una campaña contra ese partido tachándolo de ultraderechista. Kurz coordinó con el primer ministro húngaro Victor Orban y los gobernantes balcánicos el cierre efectivo de la ruta de los Balcanes que estuvo a punto de desestabilizar la región después de la decisión de Merkel del 4 de septiembre de aquel año de aceptar a todos los refugiados que llegaran a sus fronteras.

Los mejores se resisten

Aún había ayer ajustes por hacer. Se buscaba evitar que los ministerios armados, Defensa e Interior, estén en manos del mismo partido. Tampoco se quiere que lo estén Interior y Justicia. Se quiere a muchas mujeres en el gabinete y no de las estructuras de los partidos. Kurz buscaba mujeres brillantes e independientes. Pero en Austria como en toda Europa, hombres y mujeres brillantes se resisten a entrar en política, donde les pagan mal, la prensa los maltrata y tienen garantizada la violación de su intimidad y el desgaste personal, cuando no el descrédito.

viernes, diciembre 15, 2017

NO FUE PINOCHET, FUE ZAPATERO

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Viernes, 15.12.17

La clase política es culpable por no parar el odio revanchista hispanófobo

DICEN que Rodrigo Lanza, el chileno que le asestó dos golpes, el segundo mortal, con una barra de metal en la cabeza y por la espalda a Víctor Láinez, tiene un abuelo mas «facha» que su víctima. Es un militar chileno que como la inmensa mayoría de sus compañeros de armas participó en aquel régimen del general Augusto Pinochet que ahorró a los chilenos hoy vivir hoy bajo miseria y terror como cubanos y venezolanos. A cierta prensa española lo del «militar pinochetista» les vino bien para titular con la extrema derecha y no con la extrema izquierda que es donde están los auténticos inductores de esta salvajada que le lleva a Lanza a la cárcel. De nuevo. No por lesiones como en 2006 cuando dejó tetrapléjico y destruyó la vida a un guardia urbano. Por asesinato de un hombre que tachó de «fascista» por sus tirantes con la bandera de España. No es su abuelo «pinochetista» el culpable de que este joven sea un ser rebosante de odio, capaz de matar por la espalda a un desconocido. Algo tiene que ver su familia cercana, a la vista de su comunicado con argumentos de combate de la extrema izquierda criminal. Como los comunicados de ETA convierte a la víctima en el culpable que arrastra al pobre Lanza a la acción. La víctima es culpable. Como los comandos de ETA, el izquierdista Lanza actúa por necesidad y obligación.
A nadie debe extrañar el pétreo silencio inicial y las defensivas formas después con que han reaccionado ante este crimen todas las fuerzas de izquierdas. Todas, sin excepción. Porque todas se saben afectadas. Saben que los jóvenes como Rodrigo Lanza que disfrutan fantaseando con la «caza del fascista» –¿te suena Pablo?– y que han sido formados en el odio a «esa bandera que produce asco» –¿verdad Iglesias?– son miembros de las camadas gestadas por el socialista Zapatero. En el libro «Días de ira» anunciaba la violencia tras este proceso de envilecimiento de los jóvenes radicales en la izquierda que asumían con el mensaje revanchista de Zapatero la Guerra Civil, el Frente Popular, como referente ético y estético. Matar al fascista se convirtió en gesta. Eso hacía abuelos heroicos y ejemplares. A emular. Por mucho que alguno después ante el juez pretendiera que precisamente el suyo había sido un antifascista ejemplar sin ni tocar jamás un pelo a un fascista. Aunque fueran mano derecha de una máxima autoridad en sacas y ejecución de civiles como Margarita Nelken.

Los jóvenes que ayer llenaban las redes de aplausos al asesinato y disfrutan fantaseando con ejecuciones solo imitan a todos estos cargos públicos de Podemos que ya han borrado sus miles de tuits con alusiones a la muerte del adversario político. Zapatero y su hijo de guerra, Podemos, nos trajeron hasta aquí. La sangre de Láinez les salpica a ellos como a todo el frente mediático que no ha hecho otra cosa que un gran negocio de agitar contra España, desacreditar sus instituciones y símbolos y ayudar a la extrema izquierda y al separatismo a crear condiciones para «ganar ahora la guerra». Y acosar a los «fachas» desde las propias televisiones. Algunos sabemos de eso. Y en Cataluña las agresiones a la bandera de España, hasta la que pudo carbonizar a una familia con tres niños, siguen impunes. Toda la clase política española es culpable. Unos por acción y otros por cobarde omisión han dejado que el veneno de la mentira, de la desmemoria histórica del zapaterismo, destruyera el tejido de afinidades y afectos creados desde el fin de la propia guerra. Así surge ahora este odio desbocado que puede hacer de la muerte de Láinez un terrible augurio.

martes, diciembre 12, 2017

LA IMPUNIDAD COMO CONDENA

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Martes, 12.12.17

Los españoles deben imponer el castigo tanto al golpismo como al terrorismo

EL niño que jamás ha recibido un castigo real tiene muchas papeletas de conocer la cárcel como adulto. La sociedad que se acostumbra a que los delitos queden impunes sucumbe lentamente en el caos. La descomposición puede llegar tan lejos que el enfrentamiento civil o hasta la guerra se hace inevitable. Se hace trágicamente necesaria para que los humanos vuelvan a entender el sentido de reglas y leyes y un orden cuerdo de las prioridades. Así como el valor de la justicia para la paz y defensa de los más débiles. En España no estamos, de momento, cerca de la guerra. Pero sí lejos del imperio de la ley. Por las grietas del agravio, de la corrupción y de la injusticia brota muy fresco el odio, esa mercancía que volvió a cotizarse en la vida política española cuando un presidente del gobierno, que sigue impune, decidió reabrir virtualmente la guerra civil española para mayor gloria personal propia. Odio fresco porque lo ejercen y difunden jóvenes que no conocen nada más allá de su primitivo adoctrinamiento ideológico y este régimen que compensa con la impunidad y indiferencia el abandono. Odio surgido de ideologías que liberan al individuo de su deber con las leyes. Cataluña es un terrible ejemplo de cómo la impunidad de décadas ha producido masas de ciudadanos confundidos en un narcisismo tan suicida como criminal.
Con la impunidad lo primero que se elimina es la verdad que denuncia a los culpables de la brutal injusticia que siempre supone el delito de proteger al delincuente. Cuando hay impunidad hay intención o miedo por quien no cumple con su deber de perseguir el delito. El treinta aniversario del atentado de Zaragoza se celebró ayer como un nuevo trámite en nuestra paradójica agenda del olvido. Estos actos oficiales en recuerdo de las víctimas en España son dolorosamente sospechosos. Las autoridades parecen temerlos por las preguntas que regularmente resurgen y que sus esfuerzos nunca logran apagar del todo. Por eso no estaban hoy invitados algunos familiares de las niñas muertas en 1987. Por eso este gobierno ha seguido la política del anterior para dividir a las víctimas para destruir todo esfuerzo común por forzar transparencia y verter verdad sobre terribles capítulos del terrorismo que siguen en la más absoluta oscuridad.

Por eso nadie habla de que quien dio la orden de este atentado con 11 muertos es ese Josu Ternera que ha estado y está presumiblemente localizado siempre y no ha sido traído a España porque los gobernantes no quieren. Porque «pacta sunt servanda». Al menos con los terroristas. Sucede con esa fecha maldita del 11-M y el tabú implacable de su inverosímil verdad oficial. Como pasa con todos los atentados de ETA. Porque también en el recuerdo de estos pesa la «verdad oficial» de una derrota de los terroristas separatistas que la vida cotidiana en el País Vasco desmiente. La impunidad nos hace perder hasta la brújula moral. No solo a los delincuentes y a esas autoridades que delinquen al violar su deber y juramento de perseguir el delito. La sociedad se sume en un mar de confusión y malentendidos. Las palabras pasan a significar algo muy distinto a lo que decían antes. Aún hay remedio si una masa crítica de españoles moviliza a la nación contra la impunidad. A blandir la palabra con toda su verdad. A exigir castigo para Josu Ternera por sus crímenes como para todos los responsables del golpe de estado en Cataluña hoy. Conscientes de que en esa lucha contra estas impunidades y tantas otras nos jugamos nuestro futuro en paz como nación civilizada.

lunes, diciembre 11, 2017

MERCANCÍAS AVERIADAS

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Domingo, 10.12.17

Réquiem por la socialdemocracia transversal

A Pedro Sánchez le gusta hablar del retorno triunfal de la socialdemocracia tanto como a Martin Schulz. Ambos son involuntariamente graciosos. Pero tienen los líderes del PSOE y el SPD más cosas en común. Schulz vino a España a ayudar a Sánchez a darse el peor revolcón electoral de la historia de su partido, Sánchez saludó a Schulz como «nuevo canciller alemán» días antes de que este le imitara en su naufragio total. Ambos batieron los peores resultados de sus respectivos partidos.
La prueba de que Alemania ya no es lo que era cuando los trenes eran puntuales, no había mendigos y se dejaban las puertas abiertas en el campo y en la ciudad, es que Schulz no ha desaparecido del mapa tras su devastador fracaso. Alemania se ha europeizado tanto que aquello ya parece España. Y Schulz, que ha sufrido una derrota humillante, ya actúa otra vez como una joven promesa imbatida e imbatible. Con genio y figura y repartiendo el daño y la culpa entre todos los demás. Como un editor que arruina por sistema a todos pero se proclama insustituible.
Lo cierto es que el negocio de Schulz y de Sánchez está quebrado. Y lo único que pueden conseguir ambos es un salvavidas para mantenerse. Su negocio está quebrado y no solo porque lo que ofrecen ellos lo venden otros más barato. También porque lo que venden ellos peor que sus competidores es ya mercancía averiada. Schulz no tiene absolutamente nada que ofrecer que la socialdemócrata Angela Merkel no tenga en su catálogo en permanente expansión. Pero Merkel está como está, en el triste final de una memorable trayectoria política, sea ahora, en dos años o al final de una agónica legislatura. Capaz de aceptar cualquier apaño para prolongar su presencia aun a costa de regalar valioso espacio y electorado a su enemigo mortal, el partido AfD. Al que ella tacha de nazi, pero que es en realidad fantasma o reencarnación de la derecha política que ella ha vaciado y destruido.
Sánchez por su parte tiene que anunciar que reanuda la Batalla del Ebro, humilla al generalato nacional y saca a Franco del Valle de los Caídos para tener algunas ofertas que crea a salvo de la rapacidad emuladora de la socialdemocracia de Mariano Rajoy. Y yo que él no me fiaría mucho. El PP de Rajoy es capaz de hacerle un homenaje a la checa de Fomento por no verse lejos del pastel.

El problema que tienen los quebrados es que no queda nadie solvente en su entorno. Fueron todos tan diligentes en su socialdemocratización que ahora que la socialdemocracia muere, asfixiada en el lodo de sus sofismas e hipocresías, todo lo que ven queda fuera de su sistema. Por un lado tienen la vía totalitaria de los comunistas. A la que muchos no hicieron ascos. Y por el otro –¡horror y pavor!– una derecha real. ¡Qué espanto! ¡Eso sería como Trump!

LLEGÓ LA VERDAD Y NO ARDIÓ EL MUNDO

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Sábado, 09.12.17

Habían anunciado el infierno absoluto por culpa de Donald Trump. Los medios de comunicación occidentales con más fuerza si cabe que los más radicales islamistas entre los palestinos auguraban una terrible violencia que poder achacar a la decisión del presidente de trasladar la embajada de EE.UU. a Jerusalén. No ha sido así. Las protestas han sido menores y similares a las que hay cada vez que hay algo que molesta a los dirigentes palestinos. Por cualquier caricatura de Mahoma ha habido más violencia que por esta decisión de Trump. En el resto del mundo musulmán la tranquilidad ha sido general. Puede hablarse de indiferencia, al menos de momento y para terrible frustración de los agoreros occidentales.
Los palestinos rechazaban ayer indignados la oferta de Donald Trump de usar el momento para un nuevo impulso a la negociación para buscar esa solución de dos estados. Dicen que EE.UU. ya no puede mediar y que no habrá dos estados. Ya veremos. Deplorable es que cuando países árabes se avienen a colaborar con Israel, los europeos no disuadan a los palestinos de equivocarse. Con sus patológicos temores y su paralizante fobia al presidente Trump los europeos solo ayudan al nuevo fracaso palestino. Estos no dejan de equivocarse desde aquel 1947 cuando la ONU ofreció dos estados en Palestina, los judíos cogieron el suyo y los palestinos lo rechazaron porque lo querían todo. Siete décadas después, Israel es un vergel y un paraíso tecnológico, industrial y empresarial, una próspera democracia con las libertades de las sociedades europeas. Y los palestinos, engañados y maltratados por los árabes durante décadas, se pudren en el odio, la corrupción y el atraso. Recapaciten.

El traslado de la embajada es lógico y valiente. Cumple la ley, reafirma la verdad y liquida para siempre peligrosas quimeras sobre el carácter efímero del Estado de Israel. Obedece a un acuerdo del Congreso de EE.UU. de 1995, que los últimos cinco presidentes prometieron cumplir. Y refleja el respeto que se debe al país anfitrión, Israel, que quiere las embajadas en su capital como todos los países del mundo. Pronto va a tener la primera. A EE.UU. seguirán otras. Es mentira que las posibilidades de un acuerdo hayan empeorado un ápice por este hecho. Por el contrario, el reconocimiento de la verdad que se ha impuesto, abre nuevas puertas.

viernes, diciembre 08, 2017

UN GRAN REGALO DE TRUMP

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Viernes, 08.12.17

Es fácil de entender: Jerusalén es la capital de Israel

EL espectáculo es digno de verse. Otra vez pugnan los gobernantes, los políticos y los medios en el mundo occidental por superarse los unos a los otros en hipocresía y sinrazón. Y la comunidad internacional parece querer hacer de nuevo el ridículo. Como cuando el referéndum pro FARC en Colombia o la campaña electoral de todo el mundo a favor de Hillary Clinton. Ahora se repite el espectáculo. Otra vez con Donald Trump como protagonista. Todos dicen estar asustados por la violencia que pueda provocar el que vaya a cumplir una ley norteamericana de hace 22 años y su promesa electoral. Le echan la culpa de la violencia que sus enemigos puedan generar porque pone la embajada de EE.UU. donde le dicta su Congreso en la capital de un país soberano. Es la lógica cobarde del apaciguamiento que cimienta toda senda a la guerra.
Donald Trump compareció el miércoles en la Casa Blanca para anunciar –en un discurso por cierto bellísimo en fondo y forma– que va a cumplir una decisión del Congreso pendiente desde 1995. Entonces el Senado aceptó la resolución por 93 votos a favor y 5 en contra. La Cámara de Representantes votó 374 a favor y 37 en contra. Contundente. Se ordenaba el traslado de la embajada a la capital de Israel, es decir a Jerusalén. La intención clara es acabar con una anomalía y un carácter provisional que no responde a la realidad sobre el terreno porque Jerusalén es la capital del Estado y alberga todas las instituciones de la única democracia de Oriente Medio. Todos los gobernantes extranjeros que visitan Israel van al Knesset que está en Jerusalén, a los ministerios que están en Jerusalén, a las oficinas del gobierno y de la jefatura del Estado que están en Jerusalén. Por eso ya está bien que se pretenda lo que no es. No es inocua. Alimenta entre los enemigos de Israel la falsa idea de que también entre sus amigos y aliados pudiera haber dudas sobre el carácter permanente de la existencia de Israel con su capital en Jerusalén. El mensaje es Israel está para quedarse y Jerusalén como su capital. Luego abandonen toda esperanza de destruir Israel y echar a los judíos al mar. Cuatro presidentes de EE.UU. prometieron hacerlo para poner coto a esos malentendidos peligrosos. No cumplieron, por miedo o comodidad. Trump si cumple. Dicen que esto saboteará acuerdos de paz. ¿Qué acuerdos? Si en veinte años nada bueno ha pasado sin traslado de embajada, es que retrasar la decisión es inútil. Pruébese lo contrario. Es decir, el traslado.

Trump ha abierto el grifo de la realidad. Y no sale lo suficientemente tibia para estos gobernantes mediocres que no quieren líos y viven en su zona de confort de elección en elección. De ahí tanto sobresalto y ademán. Pero el chantaje del terror ha quedado roto por Trump. Aunque hoy se quejen muchos, asumirán este acto de liderazgo de EE.UU. y no tardará en haber allí otras embajadas, occidentales pero también árabes. Si algunos europeos quieren jugar a precariedades háganlo en su casa. No con el país que ha pagado y paga bien caro su derecho a existir y a florecer. El país que con la sangre y el sudor de sus hijos ha conquistado el derecho a ser ya la mayor joya de prosperidad, creatividad, libertad e inteligencia jamás creada por manos, mentes y corazones humanos en el desierto. Todo el que se respete debería aplaudir y ayudar. Y animar a los vecinos a aprender de Israel para salir ellos de la miseria en que están todos, prisioneros de un odio que los occidentales muchos veces parecen querer alimentar.

martes, diciembre 05, 2017

ENMIENDA TOTAL A LA INGRATITUD

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Martes, 05.12.17

Es inmenso el hartazgo de tanto ver premiar la deslealtad

«SOMOS españoles y pusimos la bandera… Pero nosotros no hemos hecho daño a nadie», se disculpaba con timidez y con miedo ante la cámara la mujer víctima de una nueva agresión nacionalista en Cataluña. Esta pudo haberle costado la vida a la familia. Quisieran o no quemar solo la bandera de España en aquel balcón, el caso es que el fuego provocado por unos desconocidos afectó a una puerta y diversos objetos y pudo haber incendiado la casa en la que dormían tres niños y varios adultos. Fue en Balasareny, uno de esos muchos pueblos en Cataluña de donde el Estado se retiró hace décadas y que gobiernan fuerzas separatistas con el terror ideológico contra quienes no son los suyos. Las muestras del despertar de la nación española, tras décadas de letargo y pasividad, que comenzaron a evidenciarse después del histórico discurso del Rey de España del 3 de octubre, con las grandes manifestaciones, ha llevado a muchos españoles a hacer lo que siempre quisieron y no se atrevían. También a esta familia que puso su bandera en el balcón. Para dejar claro que allí viven españoles orgullosos de serlo. Para gritar en silencio que se sigue creyendo en España aunque haya estado tanto tiempo incomprensiblemente, dolosa y dolorosamente ausente.
Este ataque incendiario es parte del esfuerzo separatista por volver a la situación de la dictadura del miedo, previa al discurso del Rey. Cuando nadie se atrevía a decir la verdad: que Balasareny es España. De momento los agresores han tenido éxito. Porque la pobre mujer reconoció llorando que «sí, sí hemos quitado la bandera. Porque aquí duermen tres niños». Están habituados a estar desprotegidos. Esto es lo que ha de cambiar. Esa familia española trabajadora y leal exige protección y ha de tenerla. Con su bandera en el balcón. El gobernante que se la niegue será arrollado.
Los españoles tienen una larguísima historia de siglos de superación de abandono y una ingratitud por parte de sus autoridades que casi forma parte de la identidad nacional. Van del maltrato a Hernán Cortés a los justificados lamentos de Blas de Lezo, de los españoles leales a España abandonados en los procesos de independencia en América a la justa indignación de José Antonio Ortega Lara por las infames concesiones de los gobernantes de Madrid, siempre para aplacar a los peores con desprecio a los mejores. La proverbial ingratitud del poder hacia los más leales servidores de la patria y la falta de interés del Gobierno por los miedos e intereses de los más humildes se nota tanto en esta falta de protección a los españoles no separatistas en Cataluña, como en el desprecio del Gobierno a los intereses de regiones que no recurren al chantaje y al victimismo como los nacionalismos.

Ahora tendrá que tener mucho cuidado este Gobierno –y cualquiera que le suceda– para no caer en el consabido hábito de favorecer a los peores. Para no caer en enjuagues y apaños políticos que ya se le ofrecen para premiar al traidor, ventajista y delincuente. Lo podría pagar muy caro. Ese rumor difuso que los gobernantes y los políticos en general comenzaron a sentir después del discurso del Rey y de las movilizaciones, pero que ya perciben con tan creciente claridad como inquietud, son el eco de un movimiento de profundo hastío que exige enmienda a los errores. Que ansía castigar la felonía de la injusticia permanente, la cobardía de los gobernantes frente al delito y al abuso y su ingratitud hacia esos millones de españoles pacientes, trabajadores, contribuyentes, leales, solidarios, patriotas y hoy indignados y definitivamente hartos.

domingo, diciembre 03, 2017

CRIMINALES, HÉROES Y HONOR

Por HERMANN TERTSCH
ABC  Domingo, 03.12.17

Los acusados de fechorías en la ex-Yugoslavia tuvieron mando en una guerra en la que todo atisbo de piedad era sospechoso

Endiosamiento Hay criminales que se sienten dioses en la batalla para decidir sobre la vida y la muerte

En sociedades que no se escandalizan con políticos que declaran hoy lo contrario que ayer y reconocen que lo hacen por conveniencia es difícil de entender que alguien se suicide por su nombre y su palabra. Cuando el vínculo otrora sagrado entre palabra y honor ya ni se practica ni se espera de los demás, la palabra no vale nada y el concepto del honor suena lejano y antiguo, casi ridículo. Eso explica que cuanto más se sabe del croata de Bosnia Slobodan Praljak, menos se entiende en estas sociedades su drástica decisión.
Praljak murió el pasado miércoles en La Haya tras beberse un vaso de cianuro en el banquillo del Tribunal Penal para la ex-Yugoslavia cuando le era confirmada su pena de 20 años de prisión como criminal de guerra. El reo se levantó y dijo con solemnidad como quien deja constancia grabada de la verdad: «Jueces, Slobodan Praljak no es un criminal de guerra, rechaza con desprecio ese veredicto». Acto seguido levantó la mano derecha en la que escondía un frasquito que bebió con pulso tembloroso. Instantes después se desplomaba. Fue trasladado al hospital, pero nada se pudo hacer por su vida.
Praljak sabía que, con dos tercios ya cumplidos, apenas le quedaba prisión que cumplir. Otros criminales condenados como los serbo-bosnios
Momcilo Krajisnik o Biljana Plavsic viven ya su vejez en libertad en sus casas tras cumplir esos dos tercios de sus largas condenas. Praljak se había entregado voluntariamente hace 13. Con 72 años, buena salud y conducta, como muy tarde en dos años podría haberse retirado a su Herzegovina natal donde es inmensamente respetado y nada le habría faltado. Le habrían cuidado y agasajado en Caplina, donde nació en 1945, como en Mostar donde miles de croatas salieron a la calle con velas a honrar a quien había sido el jefe de la defensa croata del HVO en la ciudad. Todos decían allí que Praljak no era un criminal, sino un héroe. Nadie le echaba en cara ni limpieza étnica de musulmanes en la célebre ofensiva final de Oluja (Tormenta) en 1995 ni antes la voladura del puente de Mostar, por la que la prensa le ha recordado, cuando el tribunal le exoneró de culpa directa y reconoció además que el puente era objetivo militar legítimo.
Tres carreras universitarias, una ingeniería, filosofía y sociología y además arte dramático había estudiado Praljak en Zagreb y Sarajevo. Era autor de series televisivas y documentales, escribió libros y dramas y dirigió obras en teatros en las principales ciudades croatas. Era un intelectual el suicida, el supuestamente monstruoso criminal croata que algunos han caricaturizado y comparado ridículamente con Hermann Göring. Cuando este se envenenó camino del cadalso mientras Praljak lo hacía camino de ser puesto en libertad. Nunca había sido un nacionalista ni un colaborador de la Policía comunista como sí lo fue otro de los célebres criminales de guerra de los Balcanes, el serbio de Bosnia Radovan Karadzic, psiquiatra, poeta e intelectual de café en Sarajevo, cerca de su localidad natal de Pale.

Karadzic, el «paleto»
Praljak no había preparado la guerra y hecho planes para ella como Karadzic o militares profesionales como Ratko Mladic. Karadzic había volcado en la guerra contra los musulmanes de Sarajevo todo su resentimiento social y cultural como «paleto» despreciado por las élites intelectuales urbanas y aplaudió la guerra desde el principio. Praljak por el contrario vio como la guerra lo hizo general no habiendo sido en realidad nunca ni militar. Para Mladic, la guerra fue el máximo objetivo vital. Solo la Gran Serbia le quitaba el sueño. Y su hija que se suicidó en plena campaña al saber de las atrocidades que cometía su divinizado y adorado padre. Mladic fue detenido en 2011 tras 15 años huido y condenado a cadena perpetua hace semanas por su peor monstruosidad que fue el asesinato de los 8.000 varones musulmanes de todas las edades capturados y ejecutados en Srebrenica.
Hay criminales de guerra de manual. Tanto de los militares que, como Mladic, se sienten dioses en la batalla y pasan a decidir sobre la vida y la muerte de todos, enemigos y subordinados. Muchos que han cometido inmensas atrocidades no han sido juzgados y muchos de los juzgados, unos absueltos, otros no, han hecho lo que los demás habrían hecho en su lugar.
Ante Gotovina es un aventurero de siempre y tiene esa madera mítica del guerrero que llevó a tantos soldados croatas a adorarle y a muchos croatas a considerarlo un héroe nacional cuya última gesta es pagar con 24 años de prisión en La Haya su lucha y su amor por la patria. Aunque Gotovina ya había luchado por otros. Antes de cumplir los 18 ya estaba en la Legión Extranjera francesa. Antes de los 25 era un veterano de la guerra del Chad. Y fue mercenario durante lustros en Latinoamérica al servicio de diversos regímenes y grupos paramilitares. En Croacia fue un general brillante y dirigió aquella Operación Tormenta que fue una operación masiva de desplazamiento de población y origen de la mayoría de las acusaciones contra las fuerzas croatas. Fue detenido en Tenerife en 2005.

Delincuentes puros
También había delincuentes puros. Como con los paramilitares surgidos de bandas del submundo que han encontrado en la ideología nacionalista el perfecto abrigo y pretexto para cometer todas las barbaridades y tienen en la guerra la oportunidad de desatar toda la vesania que siempre añoraron. También están ahí cabecillas guerrilleros que proliferaban en la guerra en Bosnia y Croacia y aterrorizaban a la población civil en el frente y la retaguardia. O los subordinados de Vojislav Seselj, el escritor ultranacionalista dirigente de una cuadrilla de asesinos que sembró el terror durante casi una década en los Balcanes, que es uno de los mejor parados que pasó once años en La Haya, fue liberado para un tratamiento de cáncer y hoy está en el parlamento serbio con grupo propio a pesar de que la Fiscalía recurrió su absolución de una larga lista de crímenes. Después hay figuras trágicas como la de Gojko Susak que abandonó su plácida vida de propietario de pizzería en Canadá para irse a la guerra a defender la patria, ser ministro de defensa y ser acusado por unos de traidor y por el TPIY de crímenes de guerra. Susak murió a los 53 años de un cáncer de garganta en 1998 sin ser considerado imputado.
Los hay de todas las cataduras. Patriotas que fueron demasiado lejos, asesinos vocacionales, psicópatas, hombres honrados incapaces de frenar la brutalidad de los subordinados en una guerra de odios. Hombres muy distintos entre sí, aunque todos ellos con mando en una guerra en la que todo atisbo de piedad era sospechoso. No puede evitarse la sensación de injusticia. No solo de ellos entre sí, de ellos con otros criminales quizás mucho peores que lograron escapar impunes pero también de los protagonistas de otras guerras. Porque confirman la impresión de que, juzgados por el mismo rasero, muchos héroes, militares y políticos de la II Guerra Mundial habrían acabado hoy en el banquillo de un tribunal internacional.

GOJKO SUSAK
MINISTRO DE LA GUERRA CROATA
Era un emigrante en Canadá donde se dedicaba a la hostelería. Volvió para ayudar en la guerra y por su amistad con Tudjan. Aunque sectores del Ejército le acusaron de falta de firmeza frente al enemigo, el TPIY lo acusó de crímenes de guerra.

ANTE GOTOVINA
GENERAL CROATA
Fue soldado de la Legión Extranjera francesa en la guerra en Chad y mercenario e instructor militar en Iberoamérica. Volvió a Croacia para servir en la guerra, dirigió la operación Tempestad. Huido, fue detenido en Tenerife y condenado a 24 años de cárcel.

VOJISLAV SESELJ
ESCRITOR ULTRANACIONALISTA
Lideró unidades paramilitares con delincuentes de especial brutalidad y crueldad en sus crímenes étnicos. Después de once años en una cárcel en La Haya fue liberado para que se tratara un cáncer. Tiene grupo propio en el parlamento serbio.

RADOVAN KARADZIC
PSIQUITRA Y POETA SERBOBOSNIO
Fue el líder político del proyecto de una Gran Serbia que se expandiría en el territorio de Bosnia. Responsable junto a Mladic de la limpieza étnica y los crímenes consiguientes. Fue detenido en 2008 y condenado a 40 años de cárcel.

RATKO MLADIC
GENERAL SERBIO Y JEFE DE SU ESTADO MAYOR EN BOSNIA
Dirigió la ofensiva para la conquista de una Gran Serbia tras el colapso de Yugoslavia. Condenado a cadena perpetua por la matanza de Srebrenica.

SLOBODAN PRALJAK
GENERAL JEFE DE LA DEFENSA CROATA EN BOSNIA

Condenado a 20 años por su participación en la ofensiva «Tempestad», por limpieza étnica y crímenes de sus tropas contra población civil. Se suicidó.